PUERTAS QUE SE ABREN Y SE CIERRAN
La conducta humana es incoherente por naturaleza. Hay personas que no son felices, pero prefieren engañarse a ellas mismas antes que enfrentarse a quien se les provoca esta infelicidad. No es inusual encontrar a alguien que cuando es feliz, busca en su interior nuevos indicios de falta de ella. Con estas premisas y algunas más acerca de las diferencias de comportamiento entre hombres y mujeres se teje La Cara Oculta, un interesante thriller psicológico obra del colombiano Andrés Baiz.
El inicio del film no es muy prometedor, pues tiene demasiados elementos comunes con los melodramáticos telefilmes de sobremesa que no hacen más que preguntar al espectador por qué sigue sentado en la butaca...Afortunadamente, la paciencia da sus frutos y la esencia de Hitchcock y otros grandes maestros del cine de suspense hacen su entrada triunfal en la cinta. Conforme avanza el film, va creciendo el interés por el mismo hasta que el desenlace final hace pensar al espectador que ha hecho muy bien de venir a verla.
Este film es una coproducción entre España y Colombia. Quim Gutiérrez no acaba de parecer del todo brillante en su papel de desconcertante concertista, pues no logra conectar con la inquietante presencia exigida por el guión. Menos mal que a su lado está la brillante Clara Lago, quien logra expresar toda la emotividad necesaria para dar a la cinta el todo adecuado. Por otra parte, la colombiana Martina García queda desubicada en su papel.
En su conjunto, resulta agradable de ver aunque algunos diálogos flojean un poco pero menos mal que conforme avanza el film, Clara Lago toma las riendas escénicas para llevarlo a buen puerto.
DAVID PALOMAR.-
Pie de foto: Clara Lago y Quim Gutiérrez, en la presentación de la cinta.
0 comentarios